El proceso de enseñanza aprendizaje implica la formación a través de diversos aspectos, uno de ellos la música, la cual, a partir de una metodología con el objetivo principal de la integración social, que refuerza la autoestima, la autonomía, y relación con los demás, es por esto que en Fe y Alegría Dominicana apostamos la propuesta: “La Música como medio de Inserción Social”, la cual se enmarca de manera directa en la categoría “Desarrollo Social” en el eje temático “Cultura”.
Este proyecto cuenta con el apoyo de la Asociación Cibao de Ahorros y Préstamos (ACAP) y forma parte de nuestro interés en reforzar la reimplementación de nuestras bandas musicales en los centros que conforman la red de Fe y Alegría en todo el país, así como los valores que se desarrollan con la disciplina y formación musical en nuestras poblaciones empobrecidas en las que actuamos.
Como parte de dicho proyecto, se realizó un taller práctico sobre “Reparación y manejo adecuado del instrumental de la banda de música”, el cual fue impartido por la lutier María Lucía Gallo-Belma a docentes y monitores de música de seis centros educativos de la modalidad de artes gracias al apoyo de la Fundación Corazones y la Fundación Simanof, de la mano de su directora Susan Siman quien es propulsora del Sistema de Orquesta de Venezuela.
El proyecto enfatiza una intensiva práctica grupal desde el inicio y el compromiso de mantener siempre presente la alegría y la diversión que se derivan del aprendizaje y la creación de la música con la metodología del sistema, que pone el arte al servicio de todos los niños, niñas y jóvenes, con especial énfasis en los sectores en situación de vulnerabilidad.
La columna vertebral del proceso de formación de los y las estudiantes del sistema es la preparación para participar en grupos orquestales, que constituye el alma de la comunidad y cultura del núcleo, al igual que la práctica y la diversidad de género musical siendo muy importante los ritmos autóctonos del país.
En los últimos años la educación ha pasado a ser una prioridad del Estado Dominicano, que ha establecido la urgencia de mejorar el acceso, la permanencia y la calidad educativa. Este compromiso se enmarca no sólo en las prioridades nacionales sino también en acuerdos internacionales, como el Objetivo de Desarrollo Sostenible 4, que propone “garantizar una educación inclusiva y equitativa de calidad y promover oportunidades de aprendizaje permanente para todos y todas”.